
Puntos de recarga vehículos eléctricos: Cómo realizar una instalación segura, eficiente y conforme a la normativa vigente
La creciente demanda de vehículos eléctricos (VE) ha impulsado la necesidad de habilitar más puntos de recarga, tanto en hogares como en espacios públicos. Esto pone de relieve la importancia de contar con instaladores eléctricos autorizados para garantizar la seguridad y eficiencia de cada proyecto conforme a la normativa vigente, así como a los requisitos del Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT) y la ITC-BT-52. En este artículo, analizaremos las claves para entender cómo garantizar la máxima seguridad y eficiencia en la instalación de puntos de recarga. ¡Comencemos!
¿Por qué se exige que la instalación la realice un instalador autorizado?
Cuando hablamos de un punto de recarga para vehículos eléctricos, la seguridad eléctrica y el cumplimiento de la normativa son factores críticos. Un diseño deficiente o materiales inadecuados pueden derivar en sobrecargas, cortocircuitos o incluso incendios. Por ello, la legislación establece que la instalación deba ser llevada a cabo por profesionales formados y acreditados, garantizando que las condiciones técnicas y de seguridad del REBT se cumplan al 100%.
Normativa vigente: REBT e ITC-BT-52
En España, la ITC-BT-52 (Instrucción Técnica Complementaria del REBT) establece las condiciones específicas para la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos. Algunas de sus pautas más importantes son:
➡️Ubicación segura y accesible para el punto de recarga.
➡️Separación adecuada de otros circuitos y líneas.
➡️Sistema de gestión de carga (si fuera necesario) para evitar sobrecargas en la red del inmueble.
Además, se deben seguir las directrices del Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT), que marcan las normas generales de seguridad eléctrica. Contar con un instalador eléctrico autorizado garantiza que se cumplan estos requerimientos y que la instalación pueda ser inspeccionada y certificada correctamente.
Pasos clave en la instalación de un punto de recarga
Evaluación de la potencia disponible
En primer lugar, conviene evaluar la capacidad eléctrica del inmueble para determinar si puede soportar la demanda adicional del vehículo eléctrico. En caso de ser insuficiente, se deberá incrementar la potencia contratada, de manera que la instalación funcione de forma segura y sin sobrecargas.
Selección del tipo de cargador
A la hora de escoger el dispositivo de recarga, debemos tener en cuenta que existen cargadores con diferentes potencias (monofásicos o trifásicos), velocidades de carga y opciones de conectividad. La elección final dependerá tanto de las necesidades del usuario (tiempo de recarga, frecuencia de uso, etc.) como de la capacidad eléctrica disponible en la instalación.
Dimensionado del cableado y protecciones
Para garantizar un suministro seguro y eficiente, es imprescindible dimensionar correctamente tanto el cableado como los dispositivos de protección de la instalación. En primer lugar, se deben emplear cables con la sección adecuada al amperaje previsto, evitando así sobrecalentamientos y pérdidas de rendimiento. Además, las protecciones diferenciales (tipo A o tipo B, en función de la normativa y las especificaciones del fabricante) resultan esenciales para prevenir posibles descargas eléctricas. Por último, los interruptores magnetotérmicos deben ajustarse a la intensidad de carga, con el fin de proteger el sistema ante cortocircuitos y sobrecargas.
Instalación y pruebas
Una vez seleccionados los componentes y dimensionadas las protecciones, se procede a fijar el punto de recarga en una superficie estable, lo que garantiza una colocación segura y duradera. A continuación, se conecta el sistema al cuadro eléctrico principal, incorporando los dispositivos de protección establecidos previamente. Por último, es fundamental verificar la correcta puesta a tierra y realizar pruebas de funcionamiento de todas las protecciones, de modo que la instalación cumpla plenamente los requisitos de seguridad y eficiencia.
Certificado y puesta en marcha
Tras haber completado la instalación, se procede a elaborar la documentación técnica necesaria para acreditar que el sistema cumple la normativa vigente. Gracias a este proceso, el propietario obtiene la garantía de contar con una instalación completamente segura y legal, lista para su uso.
Eficiencia energética en la recarga de vehículos eléctricos
Además de la seguridad, otro aspecto esencial a la hora de instalar un punto de recarga es maximizar la eficiencia energética. Para ello, resulta aconsejable:
➡️Instalar sistemas de gestión de carga que distribuyan la potencia disponible y eviten sobrecargas, así como interrupciones del suministro.
➡️Optar por cargadores que permitan programar la recarga en horas valle, aprovechando así las tarifas más económicas y reduciendo la factura eléctrica.
➡️Revisar periódicamente la instalación con el fin de detectar posibles pérdidas de energía o averías incipientes y mantener un rendimiento óptimo.
Tras todo lo comentado, y a modo de resumen, queda claro que…
Realizar una instalación eléctrica para puntos de recarga de vehículos eléctricos implica cumplir la normativa, garantizar la seguridad y optimizar la eficiencia energética. Contar con un instalador eléctrico autorizado es esencial para minimizar riesgos y asegurar que la instalación sea rentable y sostenible.
Dado que la normativa puede actualizarse con el tiempo, es recomendable estar siempre al día consultando el BOE o recurriendo a fuentes oficiales, como el Ministerio de Industria o las delegaciones de industria de cada comunidad autónoma.
Si estás pensando en formarte en instalaciones eléctricas en baja tensión o ya eres instalador y necesitas obtener tu acreditación, en CTEEP contamos con todas las certificaciones oficiales. Consulta nuestro curso de INSTALADOR ELÉCTRICO EN BAJA TENSIÓN y da el siguiente paso en tu carrera profesional.